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"La Implosión Previsible del Régimen Cubano: Un Análisis Crítico"

Por: Juan Manuel Moreno 

La crisis económica y social que atraviesa Cuba ha alcanzado un punto de inflexión. Lo que antes se justificaba bajo el discurso de la “resistencia” y la “soberanía” hoy se revela como el resultado de una estructura corroída por la centralización excesiva, el latrocinio institucionalizado y el tráfico de influencias. El colapso no será únicamente producto del descontento popular, aunque este crece día a día, sino de la propia incapacidad del sistema para sostenerse desde dentro.

Causas Fundamentales del Colapso

1. Centralización Asfixiante de la Economía

- La concentración absoluta de decisiones en manos del aparato estatal ha eliminado cualquier margen de innovación y autonomía productiva.  

- Sectores estratégicos como la agricultura, la energía y la infraestructura han sido subordinados a intereses políticos, dejando de lado la eficiencia y la sostenibilidad.  

- El resultado: un aparato productivo paralizado, incapaz de generar riqueza ni satisfacer las necesidades básicas de la población.

2. Desvío de Recursos y Prioridades Distorsionadas

- Fondos destinados a salud, educación y alimentación han sido desviados hacia proyectos ideológicos o caprichos personales de la élite gobernante.  

- La inversión en propaganda y control social supera con creces la inversión en desarrollo económico.  

- Esto ha generado un deterioro visible en los servicios públicos, que se traduce en hambre, precariedad y migración masiva.

3. Latrocinio Institucionalizado

- La corrupción no es un fenómeno aislado, sino un mecanismo estructural de supervivencia del régimen.  

- El saqueo de recursos estatales por parte de funcionarios y militares ha vaciado las arcas públicas y debilitado cualquier intento de recuperación.  

- El patrimonio nacional se ha convertido en botín de una minoría privilegiada, mientras la mayoría sobrevive en condiciones de miseria.

4. Tráfico de Influencias y Captura del Estado

- Las instituciones con capacidad de impulsar proyectos de gran envergadura han sido capitalizadas y centralizadas en manos de grupos de poder vinculados al Partido y las Fuerzas Armadas.  

- El acceso a oportunidades económicas depende de lealtades políticas, no de méritos ni de capacidad.  

- Este sistema clientelar ha sofocado el talento nacional y ha convertido la economía en un terreno de privilegios y favores.

Consecuencias Inmediatas

- Implosión interna del régimen: La estructura de poder, sostenida por el control absoluto, se enfrenta a su propio colapso al no poder mantener la ficción de estabilidad.  

- Desgaste social irreversible: El pueblo, aunque limitado en su accionar, ha perdido la confianza en las instituciones y busca alternativas fuera del país.  

- Aislamiento internacional: La falta de credibilidad y transparencia ha reducido el margen de maniobra diplomático y económico, dejando al régimen sin aliados sólidos ni fuentes de financiamiento confiables.

La destrucción del patrimonio productivo de Cuba no es fruto del azar ni de factores externos, sino de un modelo político-económico que ha privilegiado la ideología sobre la eficiencia, la lealtad sobre el mérito y el saqueo sobre la construcción. El régimen cubano no caerá únicamente por la presión popular, sino porque su propia lógica de poder lo conduce inevitablemente a la autodestrucción. La implosión será el resultado de décadas de corrupción, centralización y tráfico de influencias que han vaciado las bases de la nación.